Bienvenido | Inscripciones | Orientación | Donar al seminario - su ofrenda hace este ministerio posible | |
![]() |
Seminario Reina Valera
|
|
![]() |
![]() |
10. Preguntas
y Respuestas![]() Oratoria es el arte de hablar en público con elegancia para persuadir, convencer, educar o informar a un auditorio. Se dan principios básicos de la comunicación, la pedagogía y la homilética para presentar discursos, conferencias, seminarios y sermones. 28.
Preguntas y respuestas
El público agradece la posibilidad de poder formular
preguntas sobre aquellos aspectos que no le hayan quedado claro o
sobre los que discrepe. La opción de preguntar enriquece la intervención,
consigue involucrar más a la audiencia y transmite una imagen de
seguridad, de dominio de la materia. Si no se domina suficientemente el tema tratado, habrá
que evitar a toda costa el turno de preguntas, ya que se corre el
riego de no salir airoso del trance. Al principio de la intervención se indicará si se
puede interrumpir cuando surja alguna duda o si habrá al final un
turno de preguntas. La posibilidad de interrumpir puede ser preferible
cuando se esté tratando un tema técnico, complejo, resolviendo las
dudas tan pronto se presenten, lo que permite al público seguir con
mayor facilidad el razonamiento expuesto. Esta opción presenta como inconvenientes que las
interrupciones pueden impedir que el razonamiento se desarrolle con
fluidez, lo que puede perjudicar a parte del público; además, las
interrupciones dificultan controlar el tiempo de la intervención,
con el peligro de llegar a agotarlo sin haber finalizado la
intervención. Un turno de preguntas al finalizar la presentación
permite que ésta se desarrolle con continuidad, sin interferencia,
y facilita al orador a controlar mejor su tiempo. Si se opta por un turno de preguntas al final de la
sesión: Se indicará el tiempo disponible. Se invitará a la audiencia a que plantee sus dudas. Si
nadie interviene, y tras una espera prudencial, el orador puede
realizar alguna pregunta general (por ejemplo, si tal o cual punto
ha quedado claro, o si la exposición ha sido fácil de seguir) con
vistas a animar a la audiencia a que participe. Hay que evitar que unas pocas personas monopolicen el
turno de preguntas, tratando de que intervenga el mayor número
posible de personas. Mientras se formula la pregunta el orador mirará a la
persona que la plantea, pero cuando responda mirará a toda la
audiencia. Las preguntas se deben contestar con claridad, con
precisión, evitando divagar (permite aprovechar mejor el tiempo y
que se puedan formular más preguntas). Cuando se responde una pregunta, se puede preguntar al
público si alguien quiere añadir algo (de esta manera se le da más
participación, más protagonismo). El orador debe contestar siempre con educación, aunque
la pregunta formulada carezca totalmente de interés o haya sido ya
planteada. Si alguien formula una pregunta que nada tiene que ver
con el tema tratado, se le indicará amablemente que la pregunta
planteada no es pertinente. Cuando se responde una pregunta, se dará la
oportunidad a la persona que la planteó a insistir sobre el tema (por
si algo no le ha quedado claro o por si no está conforme con la
respuesta). Si este intercambio de puntos de vista comienza a
prolongarse, habría que tratar de cortar, ofreciendo la posibilidad
a dicha persona de continuar analizando el tema una vez finalizada
la sesión (se trata de evitar agotar el turno de preguntas
discutiendo un solo punto). Si el orador no sabe cómo contestar una pregunta debe
evitar mostrar nerviosismo o contrariedad. Indicará con total naturalidad que desconoce la
respuesta y solicitará al público asistente si alguien puede
responder. Si nadie contesta, el orador se comprometerá a
analizar el tema planteado y a dar una respuesta a la mayor brevedad
posible. Lo que no puede hacer bajo ningún concepto es
inventarse la respuesta (podría ser desenmascarado). El público valora la sinceridad y comprende que el
orador puede desconocer algún aspecto determinado del tema tratado.
Cuando el tiempo disponible se esté agotando, el
orador señalará que tan sólo queda tiempo para dos preguntas más.
Una vez finalizado el turno de preguntas se agradecerá
nuevamente al público su asistencia y se dará por concluido el
acto. Si por falta de tiempo no es posible un turno de
preguntas, el orador puede ofrecerse a, una vez finalizado el acto,
quedar a disposición del público para contestar cualquier pregunta
que pueda tener. 29.
Debate Una vez finalizada la intervención se puede organizar
un debate entre el público asistente para analizar el tema tratado.
Mientras que en el turno de preguntas el público
pregunta y el orador contesta, en el debate todos pueden participar
exponiendo sus puntos de vista. Para que el debate se desarrolle de forma eficaz es
necesario que el número de asistentes sea reducido (no más de
20/25 personas). El público debe estar situado de forma que facilite la
participación de todos ellos. En torno a una mesa (si su número es reducido) o en
semicírculo (si su número es mayor). Antes de iniciar el debate, el moderador introducirá a
las personas asistentes o les pedirá que ellos mismos lo hagan. De cada uno de ellos se facilitará aquella información
que resulte relevante (formación académica, experiencia, etc.) y
que permita al resto de asistentes tener una idea sobre los demás
participantes. El moderador puede iniciar el debate planteando alguna
pregunta genérica o pidiéndoles a los asistentes que den su opinión
sobre el tema tratado. El moderador debe controlar la marcha del debate con
vistas a que en el tiempo previsto puedan abordar la mayoría de los
aspectos relevantes (de ahí la importancia de tener un guión
elaborado con los puntos que se quieren tratar). También debe preocuparse por mantener su intensidad,
interviniendo si fuera necesario (lanzando nuevos temas, realizando
preguntas, etc.). En su papel de moderador, el orador debe mostrar máxima
corrección y educación, pero actuando con firmeza si fuera
necesario (reconduciendo el debate si comenzara a desviarse del tema
tratado, corrigiendo a algún asistente que utilizara un tono
inadecuado, solicitando moderación si el debate fuera subiendo de
tono, etc.). Tratará de repartir el tiempo entre todos los
presentes de forma equitativa, evitando que unos pocos puedan
monopolizarlo. Cuándo queden 5 minutos para su conclusión se avisará
a los participantes. Se pedirá a cada uno de ellos que brevemente resuma su
punto de vista. El moderador concluirá haciendo un breve resumen de
los temas tratados y de los puntos de vista expuestos. Se finalizará dando por concluida la sesión y
agradeciendo al público su asistencia. 30.
Críticas Después de hablar en público, resulta muy útil pedir
la opinión a algunos de los asistentes sobre como ha resultado la
intervención. Hay que tratar de buscar opiniones sinceras, objetivas,
en las que se destaquen los puntos fuertes y aquellos otros que
necesiten ser mejorados. También resulta muy útil grabar en video la
intervención. Permitirá analizar con detenimiento todos los aspectos
de la misma: voz, lenguaje, gestos, movimientos, entusiasmo mostrado,
seguridad, etc. Hay que ser riguroso en el análisis (aunque sin llegar
a ser autodestructivo) y detectar los fallos cometidos, sus posibles
causas (falta de ensayo, imprevistos, nervios, escaso dominio de la
materia, etc) y ver las posibles medidas a adoptar para evitar que
se vuelvan a repetir. Hay que analizar la naturalidad y la soltura mostradas
ya que son aspectos claves para captar el interés del público. Si se han empleado medios de apoyo visuales hay que
valorar como han resultado (si han enriquecido la intervención, si
han ayudado a captar la atención del público, si se han utilizado
con soltura, etc.). También resulta muy útil hablar con gente experta con
vistas a buscar consejos. Cada participación en público viene a ser un ensayo
general de la siguiente, y en cada una de ellas hay que tratar de
evitar cometer los mismos errores que en la anterior. Sólo se pueden corregir estos errores si se conocen cuales han sido. |
![]() |
|||
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
Bienvenido | Inscripciones | Orientación | Donar al seminario - su ofrenda hace este ministerio posible |